La paleta de colores de esta excepcional finca con impresionantes vistas al horizonte de Palma y al mar recorre como un hilo rojo toda la arquitectura, desde las líneas claras de los armarios empotrados hechos a medida en la zona de entrada hasta los tonos naturales cuidadosamente coordinados de los salones y dormitorios. La armonía de los materiales refuerza la sensación de continuidad espacial: los tonos beige cálidos no sólo dominan las paredes, sino que también se encuentran en el mobiliario, los textiles e incluso en las superficies de travertino de los baños. La pieza central de la villa de 794 m² es el luminoso salón, cuyos ventanales del suelo al techo ofrecen espectaculares vistas de la bahía de Palma. Aquí, arquitectura y paisaje, espacio interior y exterior se funden en uno. La amplitud de esta estancia se prolonga en la cocina de diseño de planta abierta, donde los materiales naturales se combinan con la tecnología más avanzada. Seis lujosos dormitorios, cada uno con su propio cuarto de baño, crean refugios íntimos, cinco de ellos con vestidores contiguos. Las transiciones entre las habitaciones están deliberadamente escenificadas: Una ventana panorámica hábilmente colocada conecta la zona principal con el cuarto de baño, reflejando la luz y creando un juego entre transparencia e intimidad. Esta declaración arquitectónica se complementa con elementos textiles: una cortina que va del suelo al techo puede cerrarse suavemente cuando sea necesario para crear un ambiente privado. La zona exterior rinde homenaje al estilo de vida mediterráneo. Más de 150 m² de terraza rodean una piscina de agua salada cuyo reflejo refleja el cielo de Palma. Una cocina exterior invita a los huéspedes a socializar, mientras que el extenso jardín transforma la finca en un oasis natural de calma. Detrás de la estética diáfana se esconde tecnología punta: control inteligente de la vivienda, calefacción por suelo radiante, una bomba de calor de bajo consumo y sistemas de seguridad y alarma garantizan el máximo confort. Una bodega privada acentúa el carácter exclusivo de esta propiedad. Esta visión arquitectónica, que combina tradición y modernidad, se hará realidad en el invierno de 2027.