En un terreno de casi 18.000 metros cuadrados encontramos esta idílica casa de piedra natural. Unos 430 metros cuadrados construidos repartidos en planta sótano, planta baja y primera. Apreciamos el buen trabajo hecho a través de detalles como la entrada principal de la casa, dónde el suelo se ha hecho con piedras de torrente/río o la doble altura en la entrada/hall. Especialmente la carpintería es de alta calidad debido a los trabajos realizados por el mismo propietario; madera de roble, doble acristalamiento y de seguridad, lavabo de madera lacada y muchos más detalles. En la casa se inspira un ambiente familiar de paz y tranquilidad; enorme salón comedor con vistas a la piscina exterior de 12x5 metros, una cocina de tipo bóveda de mares a corte milimétrico y una encimera de terracota y piedra tratada. En el exterior tenemos una zona ajardinada de aproximadamente 400 metros cuadrados, por al alrededor de la piscina y la zona de barbacoa cubierta con cocina outdoor. En el fondo del terreno, vallado, se encuentran árboles frutales (limonero y naranjo), almendro y olivos. Por parte de la arquitectura cabe destacar su enorme párking subterraneo y el porche acristalado. Si esta finca te transmite algo, no dudes en pedir más información!